OCTUBRE 08 DE 2023
Una semana se ha cumplido de la tragedia que traspaso fronteras y llegó al vaticano; el colapso de la Iglesia Santa Cruz que ha dejado sin vida a 12 personas: 7 mujeres, tres menores de edad y dos masculinos.
El predio donde se ubicaba la parroquia se encuentra desolado, entre un clima de tristeza y sombrío.
El domingo 1 de octubre se celebraba una misa de bautizos comunitarios con poco más de 60 personas al interior. El padre Ángel oficiaba la homilía.
De pronto, cayó la losa y paredes de la parroquia, casi todos los asistentes quedaron abajo de los escombros, el padre se resguardo en el altar. Otros feligreses más corrieron y otros más abajo de las bancas lograron salvar sus vidas.
Se congregaron cientos de personas para apoyar en el rescate de los heridos y lesionados. En el lugar perdieron la vida 10 personas; mientras que en la semana dos más fueron vencidos por las fuertes lesiones que sufrieron.
Este domingo el padre Ángel Vargas dio una pequeña ceremonia en el lugar, dejando flores y encendiendo la luz en busca de paz para todos.
En entrevista, señaló que quien deba ser señalado por su responsabilidad, así será e incluso su persona.
«Todos queremos llevar un mensaje de paz, después de esto queremos paz y quien tenga que ser acusado así será, si yo tengo que se responsable lo seré», expresó.
Vecinos y quienes transitan a pie o vehículo se detienen un momento para tomar fotos u observar las escenas estremecedoras por los recuerdos de un hecho lamentables que dejarán marcada o por siempre la vida de los tamaulipecos.